Situada en la provincia de Burgos y en los
límites con Cantabria, esta localidad se caracteriza por su paisaje kárstico
modelado por el agua. La llamada Cueva del Agua ha motivado el interés para
diversos estudiosos de la geología y ciencias afines. De ella parte un arroyo
que atraviesa la población para después caer en cascada hacia el río Ebro que
pasa muy cerca.
Orbaneja del Castillo limita al norte con las
poblaciones de Bascones de Zamanzas, al sur con San Felices del Rudrón, al este
con Escalada h al oeste con Villaescusa de Ebro y Valderredible.
UNA
HISTORIA INTERESANTE
La Cueva del Niésparo, a unos 90 metros sobre
el cauce del río Ebro y el arroyo de Horca Menor, estuvo ocupada al menos en
dos ocasiones, una en el Epipaleolítico, que ha servido para analizar el tipo
de fauna, de industria lítica y otros materiales de las gentes que habitaban
por esta zona. Según se cree está relacionada estrechamente con los desarrollos
tipológicos y culturales de las vecinas provincias de Álava y Navarra.
El pueblo actual se originó a partir de la
Edad Media y a tenor de su topónimo queda claro que en ella había originalmente
un castillo.
En esta población vivieron mozárabes venidos
de Al-Andalus. Era un pueblo con
aljama, de la que queda el recuerdo en los nombres de algunas calles.
Los Templarios levantaron en ella el hospital
de San Albín y con posterioridad los Reyes Católicos le dieron el título a la
villa.
Ests pueblo estaba incluido dentro de la
diócesis de Santander, en el arciprestazgo de Cejancas, junto con Turzo,
Bricia, Cilleruelo de Bricia y otros pueblos de este entorno.
En el año 1827, Sebastián Miñano y Bedoya
especificó que tenía 38 vecinos y producía trigo, cebada, centeno, legumbres y
toda clase de frutas.
ESTRUCTURA
AGRARIA
En este pueblo se mantenía un modelo de
reparto de las tierras escasas y minúsculas en sus campos del páramo, por
encima del cantil que abriga el caserío, repartida en estrechas franjas de
cultivo (hasta casi un centenar), para que cada vecino lentejero tuviera un reparto equitativo de la tierra.
Relacionado con esto son las eras del pueblo.
Están situadas en la zona llana yendo a la Escampada. Junto a las eras se
construyeron algunos chozos de piedra en seco, sin ningún tipo de argamasa, que
servían para guardar los aperos para la trilla y el beldado del grano.
Pese a ser el pueblo un conjunto histórico,
estas construcciones son poco conocidas pues se debe hacer un recorrido desde
el pueblo hasta llegar a ellas.
Vale realmente la pena acercarse hasta este rincón
burgalés de Orbaneja del Castillo, dado que la villa está considerada como
Conjunto Histórico desde 1993 y la denominada Cueva del Azar, que contiene arte
rupestre, es un Bien de Interés Cultural mucho más antiguo todavía, desde 1985