La presente edición de TIEMPO DE VIAJAR incluye dos interesantes reportajes: El primero de ellos dedicado a BRUJAS la ciudad belga conocida como la Venecia del Norte. En un segundo reportaje realizamos una interesante visita al PALACIO DE GOLESTAN auténtico esplendor persa en la capital iraní. Y en los Destinos Mágicos invitamos al lector a realizar un recorrido por la CRIPTA DE SAN ANTOLÍN maravilla visigótica del siglo VII, situada bajo la actual catedral de Palencia. Excelente el capítulo gráfico en la Galería de Fotos. http://info-tiempodeviajar.blogspot.com Adéntrate en las páginas de TIEMPO DE VIAJAR, donde siempre encontrarás reportajes, una amplia galería de fotografías, noticias, curiosidades y todo lo relacionado con el mundo del viaje y la aventura. Incluso tienes un contacto por si quieres formular alguna consulta.

LEOPARDO

EL PRÍNCIPE DE LA JUNGLA


Sigiloso, astuto, gran depredador, solitario y tan bello como temido, el leopardo es uno de los grandes félidos más adaptables. hanita en todo tipo de hábitats, siempre que tenga un lugar donde esconderse y existan suficientes presas para sobrevivir, se encuentra en todo tipo de bisques y selvas, en las sabanas, sembraods y lugares rocosos e incluso en zonas desérticas, En algunos lugares desarrolla formas para evador a otros depredadores mayores o más numerorsos, como es el caso del león, las hienas de äfrica y el tigre en Asia. Realmente el único factor que limita a éste animal son los humanos.

El leopardo (Panthera pardus) es un mamífero carnívoro de la familia de los félidos. Al igual que tres de los demás félidos del género Panthera (el león, el tigre y el jaguar), están caracterizados por una modificación en el hueso hioides que les permite rugir (nuevas investigaciones aseguran que la capacidad de rugir se debe a adaptaciones morfológicas, sobre todo en la laringe y en las cuerdas vocales). También se lo conoce como pantera parda y, cuando presenta un pelaje completamente oscuro, como pantera negra (melánico).

CARACTERISTICAS

El leopardo tiene una silueta bastante maciza, con la cabeza redonda y la cola larga y fina. Sus patas son potentes, con cuatro dedos en las posteriores y cinco en las anteriores, siendo todas sus garras retráctiles. Alcanzan de 91 centímetros a 1,91 metros de longitud, más la cola que mide de 58 a 110 centímetros y una altura en la cruz de 45 a 78 centímetros. Los machos adultos llegar a pesar entre 47 y 90 kilos y las hembras de 30 a 60 kilos.

No es raro que se le equipare al guepardo, con el cual comparte un rasgo pelaje amarillento con motas oscuras. Sin embargo, tanto la morfología como la biología de ambas especies difieren enormemente, y taxonómicamente pertenecen a géneros distintos. Menos fácil resulta diferenciarlo del jaguar, pero la distribución geográfica de esta especie hace que no haya confusión entre ambas.

Se denomina panteras negras a los leopardos y/o jaguares melanicos. El color negro es producido por una gran cantidad de melanóforos (células pertenecientes a una de las capas de la piel) distribuidos por toda la superficie corporal.

BIOLOGÍA

Los leopardos cazan preferentemente por la noche y acostumbran a pasar el día durmiendo entre la vegetación, en cuevas o, a menudo, sobre la rama de un árbol al que trepan con agilidad a pesar del tamaño que poseen. Por lo general suelen evitar en lo posible la presencia del ser humano debido al temor que les infunde.

Para este animal, el árbol es a la vez donde descansa, desde donde observa y caza a su presa, y donde almacena su comida. Desde lo alto del árbol, el leopardo puede tender una emboscada a sus presas y también dejar la comida fuera del alcance de algunos carroñeros.

REPRODUCCIÓN

Son animales solitarios excepto en la época de reproducción. El periodo de gestación dura alrededor de tres meses (90 a 105 días) y la hembra puede tener de uno a seis cachorros por camada, aunque lo más común es de dos a cuatro. La madre suele transportar a las crías sujetándolas con los dientes por el cuello. Los mantiene durante dos años. Llegan a vivir alrededor de veinte años.

HÁBITOS

El leopardo suele estar activo las veinticuatro horas del día, esto es, estar activo en cualquier momento, sea de día, de noche, al oscurecer o al amanecer. En estudios donde se han utilizado collares con radio, los ejemplares estudiados se han mantenido en movimiento alrededor del 50% del tiempo. Las madres permanecen con sus cachorros durante cierto tiempo y a lo largo del celo las parejas están juntas por unos días. El resto del tiempo, el leopardo hace una vida solitaria.

CAZADOR OPORTUNISTA Y VERSÁTIL

Los leopardos tienen una dieta muy amplia que abarca más de un centenar de especies de vertebrados. Se alimentan de una mayor diversidad de presas que las otras especies del género Panthera, y se han reportado leopardos comiendo prácticamente cualquier tipo de animal al que superen en tamaño o puedan abatir, desde escarabajos hasta elands comunes, aunque sus presas más frecuentes suelen estar en el rango de los 20-80 kilos. La presa más grande abatida por un leopardo que se ha reportado, ha sido un eland macho de 900 kilos, aunque los leopardos no suelen cazar animales tan grandes.

Su dieta consiste principalmente en ungulados (como diversos antílopes y hasta incluso elands; en Asia también cazan ciervos y jabalíes), seguido de primates, principalmente monos de diversas especies (entre ellas el cercopiteco verde y todas las especies de babuinos). Sin embargo, también se alimenta de manera oportunista de roedores, reptiles, anfibios, aves (especialmente aves terrícolas), peces y depredadores más pequeños (zorros, chacales, martas, servales y gatos). Incluso son capaces de predar sobre licaones, lobos, guepardos y ejemplares jóvenes de las mayores especies de pitónidos (pitón reticulada, pitón de Birmania y pitón africana de roca) y crocodílidos (cocodrilo del Nilo, cocodrilo de las marismas y cocodrilo de agua salada) con las que comparte territorio, en tanto que las especies menores (cocodrilo enano y cocodrilo siamés) puede predar también sobre ejemplares adultos, al igual que sucede con el gavial y el aligátor chino. Eventualmente se alimenta de las crías de las tres mayores especies de hiénidos, de las de los leones y de las de los cinco úrsidos con los que comparte territorio en algunas regiones de Asia (oso pardo, oso panda gigante, oso malayo y oso negro asiático).

El leopardo es uno de los pocos depredadores de los bonobos y chimpancés adultos, y también puede predar sobre gorilas orientales y occidentales jóvenes (en el caso de los machos) y hembras adultas. Igualmente, de su amplia gama de presas, suele evitar a las que son potencialmente peligrosas por vivir en grupos (chimpancés, lobos, licaones, babuinos, etc.) y/o ser especies que puedan ofrecer gran resistencia (guepardos) o abatirlo (gorilas).

COMPETENCIA Y ENEMIGOS

Los leopardos deben competir por alimento y refugio con otros depredadores grandes como son el tigre, leones, guepardos, hienas manchadas o rayadas y hasta cinco especies de osos y perros salvajes africanos y asiáticos. Estos animales pueden robar la presa muerta del leopardo, devorar a sus crías o incluso matar leopardos adultos. Los leopardos coexisten junto a estos otros grandes depredadores cazando diferentes tipos de presas y evitando las áreas frecuentadas por ellos. Los leopardos también pueden retirarse a un árbol frente a la agresión directa de otros grandes carnívoros, pero se ha visto que matan o atacan a competidores como el chacal de lomo negro, el caracal, el gato salvaje africano y los cachorros de leones, guepardos, hienas y perros salvajes.

En áreas donde el leopardo comparte territorio con el tigre, la coexistencia no es la regla general; los leopardos son poco frecuentes donde los tigres son numerosos. La densidad media de leopardos disminuyó de forma significativa cuando la población de tigres aumentó, por ejemplo en el Parque Nacional Rajaji en India, después de la reubicación de los pastores fuera del parque. Allí, las dos especies tienen una superposición dietética alta, y un aumento en la población de tigres dio como resultado una fuerte disminución en la población de leopardos y un cambio en la dieta del leopardo a presas pequeñas (del 9 al 36%) y domésticas (de 6,8 a 31,8%).

En el Parque Nacional Chitwan de Nepal, el tigre de Bengala coexiste con el leopardo indio porque hay una gran cantidad de presas, una gran proporción de presas es de menor tamaño y existe una vegetación densa. En dicho territorio, el leopardo realizó sus matanzas con presas de menor tamaño, mientras que fueron los tigres quienes se alimentaron con presas de mayor envergadura.

Otro ejemplo. A mediados del siglo pasado, los leopardos de Amur estaban ausentes o rara vez se encontraban en la región de Primorie, en el Lejano Oriente ruso, en los lugares donde vagaban los tigres siberianos. Las encuestas realizadas a comienzos del siglo XXI revelaron que el rango de ambas especies se superpone en esta región, especialmente en las áreas protegidas donde las densidades de ungulados son altas y la perturbación humana es baja.

El leopardo forma parte de los big five, denominación que tienden a usarse en el continente africano para definir a los animales más atractivos para el visitante. Un pequeño y destacado grupo en el que se encuentra el leopardo junto al león, elefante, rinoceronte y búfalo.

El leopardo, príncipe de la jungla, es, sin lugar a ningún género de dudas, un protagonista muy especial dentro del gran espectáculo de la naturaleza salvaje.